LOCALIZACIÓN Y ACCESIBILIDAD
Se entra en el término municipal de Villar del Pedroso por el Puente del Arzobispo, se toma un camino a la derecha, inmediatamente después de pasar el Puente sobre el río Tajo, y siguiendo la vereda más próxima al Tajo se llega finalmente al desfiladero, en más o menos dos km de recorrido.
El desfiladero tiene, desde su inicio en un antiguo molino hasta la desembocadura en el Tajo, unos 750 m. de longitud.
ATRACTIVOS DE LA VISITA
Observaremos las curiosas formas erosivas del berrocal, originadas por meteorización química y mecánica de las rocas graníticas: los bloques redondeados, las “piedras en seta” y las “piedras caballeras“, así como los distintos planos de fracturación (diaclasas) que han determinado la formación de bloques de diferentes tamaños dentro de las rocas graníticas masivas y en los diques de aplitas.
Resulta espectacular el encajamiento del Arroyo del Pedroso en estas rocas, con formación de rápidos, cascadas y “marmitas de gigante” o pilancones (ver Geositio 32).
En las proximidades podemos visitar las ruinas de varios viejos molinos y del impresionante Fuerte de Castros, sus murallas, los pilares del puente sobre el río Tajo y las viviendas de los alrededores. Se trata de una fortaleza musulmana levantada en el siglo X, junto a la cercana ciudad islámica de Vascos, para la defensa de la frontera media del Tajo.
En una plaza de Villar del Pedroso podremos también admirar varias esculturas zoomorfas (“verracos”), realizadas por el pueblo vetón de la Edad del Hierro, así como numerosas inscripciones romanas de gran interés arqueológico.